Romance del Rey Don Rodríguez
Anónimo castellano Siglo XXI
CAPÍTULO PRIMO Dormía el rey don Rodríguez acostado en la su cama: La pierna izquierda encogida, la diestra, más estirada. (la otra pierna, la de enmedio... es costumbre no mentalla) Dormía plácidamente: Hay que ver lo que roncaba, so la lana del embozo de su manta zamorana. La reyna doña Sonsoles, que al su lado estaba echada, roncaba un aria da capo que ni la María Callas... Y antes de que cante el gallo... (que lo suele hacer al alba, porque sepan las gallinas quién les canta y quién les manda...) con el rostro demudado, ¡Don Rodríguez despertaba! : -"¿Qué es aquesto? (Diz el Rey) ¿Quién mi sueño sobresalta? ¡A mí la guardia moruna del Ministro Rub-al-Kaaba!" Y avanzando entre las sombras que rodean la su cama... ve que crece, ve que avanza... la silueta recortada de un espectro, de un fantasma... ¡Vive Dios que miedo daba! |
Entre nubes de sulfuro y otras de canela en rama, a los pies del rey Rodríguez el espectro da la cara: Va vestido de uniforme, calzón corto, con polainas... y, esparcidas por el pecho, quien en ello se fijara... no verá que lleve estrellas, sino bujeros de bala. LLeva gafas redonditas -las que John Lennon llevara- y así... visto desde lejos, se da un aire con Azaña. Noble porte, talle recio, cabellera ya entrecana... Y quién es y a qué ha venido, allí mesmo lo declara: -"¡Yo me llamo Juan Rodríguez: Soy tu abuelo... noramala. Y aquí vengo por decirte cuatro cosas a la cara! " -"¿Tú, mi abuelo idolatrado, el que Franco me matara? ¿Tú, la víctima primera de entre todas las de España? " -" ¡Ese soy... y menos coba! " -" ¡A mis brazos, camarada! " |
CAPÍTULO SEGUNDO -"Ya son setenta los años |
Allí estamos a millares,
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