Un día, en el Paraíso, Eva llamo a Dios:
- Tengo un problema.
- ¿Cuál es el problema, Eva?
- Sé que me has creado, que me has dado este hermoso jardín, todos estos maravillosos animales y esa serpiente con la que me muero de risa... pero no soy del todo feliz...
- ¿Cómo es eso, Eva? - replico Dios desde las alturas.
- Me encuentro sola, y además estoy harta de comer manzanas...
- Bueno Eva, en tal caso, tengo una solución... creare un hombre para ti.
- ¿Que es un hombre?
- Tengo un problema.
- ¿Cuál es el problema, Eva?
- Sé que me has creado, que me has dado este hermoso jardín, todos estos maravillosos animales y esa serpiente con la que me muero de risa... pero no soy del todo feliz...
- ¿Cómo es eso, Eva? - replico Dios desde las alturas.
- Me encuentro sola, y además estoy harta de comer manzanas...
- Bueno Eva, en tal caso, tengo una solución... creare un hombre para ti.
- ¿Que es un hombre?
- Un hombre será una criatura imperfecta, con muchas artimañas. Mentira, hará trampas, será engreído... vamos, que te va a dar problemas... Pero, va a ser mas fuerte y rápido que tú y le gustará cazar y matar cosas... Tendrá un aspecto simple, pero como te estas quejando, le creare de tal forma que satisfaga tus... eh... necesidades físicas... Y tampoco será muy listo, y destacará en cosas infantiles como pegarse o dar patadas a un balón... Necesitará tu consejo siempre para actuar cuerdamente.
- Suena bien - dijo Eva, mientras levantaba la ceja irónicamente.
- ¿Cuál es el truco?.
- Pues... que lo tendrás con una condición.
- ¿Cuál?
- Como te decía, será chulo, arrogante y muy narcisista... así que le tendrás que hacer creer que le hice a él primero... recuerda... es nuestro secreto... de mujer a mujer.
- Suena bien - dijo Eva, mientras levantaba la ceja irónicamente.
- ¿Cuál es el truco?.
- Pues... que lo tendrás con una condición.
- ¿Cuál?
- Como te decía, será chulo, arrogante y muy narcisista... así que le tendrás que hacer creer que le hice a él primero... recuerda... es nuestro secreto... de mujer a mujer.